Isla del Faro

Me incorporé haciéndome la indignada al ver que se lo pasaba en grande a mi costa, "¡¿Cómo puedes permitir que una señorita como yo se arrodille ante tí?! ¡¿No te da vergüenza?!". Pasé mi mano por el suelo de manera rápida con la intención de tirarle arena, como si de agua se tratara y me quedé mirándole con el ceño fruncido.

Simplemente te seguía la broma. contesté.No pensaba que te lo tomarías así. añaadí

"Ya claro, seguramente..." contesté intentando mantenerme seria

Era hora de atender unos asuntos así que me despedí.Me tengo que ir Alice. Espero verte pronto. dije mientras salía de allí.

"Hasta luego" le despedí y le ví marchar. Me quedé allí tumbada con los ojos cerrados, formando una burbuja de la que sólo una persona podría sacarme. Pensando en nosotros y en todo lo que se nos vendría encima en un futuro. Cansada de dar miles de vueltas a temas sin solución aparente, me sumerjo en el agua y salgo de allí

Llegué a la isla del faro sin saber muy bien como. Tampoco estaba segura de lo que pensaba hacer ahí. Comencé a caminar por ahí, recorriendo la pequeña islita. Quizá se me ocurriera algo divertido que hacer...

Fui a la Isla del Faro cuando un olor extremadamente feo llegó a mis fosas nasales. Pero estaba muy aoctsumbrado a él, era, por supuesto, Sera. La busqué con la mirada. Estaba caminando distraídamente por la isla y me acerqué a ella "Hola" la saludé con uan sonrisa.

Escuché que alguien me saludaba. Me había tomado por sorpresa. -Hola, perrito- saludé arrugando la nariz a propósito, y mirándolo con mala cara. Solté una risa y luego vi llegar a otra licántropa. Ese olor me molestaba mucho más -Hola - le dije amablemente.

Rodé los ojos con Serena y vi que llegaba otra chica, que no conocía. La saludé con una sonrisa "Soy Jack" me presenté.

Pensé que iba a ser muy maleducada sin presentarme, por lo que lo hice -Yo soy Serena- le dije sin agregar nada más. Me acerqué a Jack y me abracé a su brazo.

"Un placer" le dije a Dafneé. "¿Eres nueva por aquí?" le pregunté. No la había visto antes. Sentí a Serena agarrando mi brazo. Agradecía tener una chaqueta puesta.

Escuché la respuesta de la licántropa, y asentí. No parecía ser una mala chica, como otra licántropas que conocía... Aún así olía mal.

"Ya veo, ¿haz estado en la playa de La Push?" le pregunté, para que no se formara un silencio incómodo. "Es bastante agradable" añadí desordenando mi cabello con la mano que cuidadosamente había soltado de Sera.

Escuché a Jack y entrecerré los ojos. ¿Acaso pensaba sacarme de la conversación? Lindo, realmente lindo. Esperé amablemente la respuesta de la licántropa. Jugué con mi cabello distraídamente.

No sabía que agregar por lo que comencé a jugar con la graverdad de una piedra que tenía cerca. Luego la exploté y volví a jugar sus átomos.

Vi llegar a Michelle... me dio un beso. Me separé de ella con una sonrisa un tanto forzada. Hace tiempo que no la veía. Recordé lo que había sucedido el último día que la había visto. Le envié una mirada a Sera.

Me shockeé un poc al ver la desagradable licántropa de aquel día tan lejano llegar. Pusé cara de asco y miré confundida a Jack al ver que se besaban. Se acababa de ganar una charla bastante grande. Escuché la pregunta de la perrita. Esa era la chica con la que Jack se había ido de la discoteca aquel día... No era un lindo recuerdo, casi moría por eso, y la verdad que no exageraba. Recordaba perfectamente lo de mi viaje inesperado al pasado. Esperé a ver si Jack decía algo inteligente que no me hiciera sacarle la cabeza.

Me pasé la mano por el cabello un poco nervioso. Ahora no sabía muy bien que decir. Michelle me gustaba, pero Sera... Bueno, era Sera. "Ups"... Me veía en un callejón sin salida. Carraspeé sin estar muy seguro de como continuar. Esperaba que no me estuviera tardando demasiado. La mirada de Serena me asustaba, era intimidante. No sabía como lograba eso.