Baños femeninos

"Nunca. Me sería imposible estar con otro después de haber estado contigo..." contesté colocando su pelo de nuevo

- Eso lo dices ahora, pero a la hora de la verdad... estoy seguro de que lo harías - contesté jugando con su pelo como había hecho horas antes, antes de que todo esto empezara, antes de que acabarámos escondidos en un baño.

"No existe nadie para mí que no seas tú..." contesté mirándole. Noté como jugaba con mi pelo y sonreí, me gustaba que lo hiciera

Me mordí el labio al escuchar sus palabras, ella era simplemente perfecta, y que dijera eso, aunque no fuera cierto, era increíble. - Me gusta que digas eso - dije ampliando mi sonrisa.

Sonreí al escucharle, "Me encanta decirte lo mucho que significas para mí..." contesté

- Y a mí me encanta oírlo, aunque me resulte imposible creerlo - contesté.

"Pues creételo, porque es verdad" contesté sin más. Posiblemente le sonara a tópico, pero era así.

- Si tú lo dices... - dije volviendo a colocar mis dos manos en su cintura.

"Pues sí, yo lo digo ¿algún problema?" le contesté en tono de broma

- Ninguno, señorita, sólo que espero que eso no se quede en palabras y lo demuestre usted - dije mirandola con picardía.

"Ni lo dudes. Tendrás el placer de verlo por tí mismo" contesté riéndo por su broma

- Eso es algo que definitivamente, quiero ver - contesté concentrando la mirada en sus ojos marrones.

"Tengo una vida para demostrártelo, creo que es tiempo suficiente para ello..." contesté con una sonrisa

- El tiempo que esté a tu lado nunca será suficiente... - puntué acariciando la parte baja de su espalda.

Le dediqué una sonrisa y apoyé mi cabeza en su pecho estrechando el abrazo. "No te alejes de mí nunca. De verdad no concibo estar sin tí"

- Tranquila, no tienes que preocuparte de eso - inspiré profundamente, embriagándome con su olor. El momento era perfecto, a pesar de que estuvieramos en un baño.

"Eso espero, no podría soportarlo" contesté con un suspiro escuchando los latidos acompasados de su corazón

Miré la hora de mi reloj, era realmente tarde, las horas siempre pasaban volando a su lado - Será mejor que vayamos al baño de casa - comenté bromeando.

Miré la hora de mi reloj al escucharle, "No tiene tanto estilo como este, pero creo que será lo mejor" contesté entre risas.

- Por supuesto, ninguno puede compararse con este baño... - dije riendo. Abrí la puerta del cubículo y me dirigí hacia la salide, pero al llegar a la puerta frené en seco - Será mejor que mires si hay alguien fuera - dije mirandola.

Salí del cubículo tras él y escuché lo que dijo. Abrí la puerta y asomé la cabeza. Estábamos prácticamente solos. Salí y le mirá indicándole que podía seguirme

Salí detrás de ella, con una sonrisa, no podía evitar pensar que acababa de pasar un momento increíble en un baño, aunque con ella, todos los momentos eran así.

Observé su sonrisa y se la devolví, "De camino a casa puedes explicarme el motivo de tan amplia sonrisa..." contesté cogiéndole de la mano

- Sólo pensaba en que eres perfecta - dije agarrando su mano y saliendo camino a casa.

Sonreí al escucharle y salí de allí con él