El lago...

Estaba claro que no era la mejor respuesta que había podido dar... pero es que derepente era todo un poco raro... Noté que bajaba la mirada, "¿Qué te pasa?" pregunté mirándole con la cabeza ladeada

- Nada - respondí intentado sonreir sin que pareciera muy falso. Pasé el brazo por sus hombros, acercándola a mí. Tenía que volver a relajar el ambiente que yo había tensado. - ¿Sabes? Me he quedado con hambre - dije divertido.

No sonó muy convincente, por lo que iba a replicarle, claro que su segundo comentario me convenció para dejar el tema... "Pues no es bueno que te quedes con hambre, tienes que alimentarte bien..." dije sonriéndo de manera pícara.

Al parecer había conseguido que olvidáramos el tema, o por lo menos que lo evitáramos, porque una vez más, dudaba que fuera a olvidar esto - ¿Qué podremos hacer para solucionarlo? - pregunté acariciando su brazo, mientras sonreía de lado.

"Se me ocurre una cosa..." dije agarrándole de la camiseta mientras me tumbaba de nuevo

Esbocé una sonrisa pícara mientras me tumbaba con cuidado sobre ella - No acabo de pillarte - dije mirandola a los ojos divertido.

"¿Seguro que no?", dije mientras empezaba a besar su cuello y pasaba las manos bajo su camiseta

Sentí sus besos por mi cuello - Creo que voy cogiéndolo, pero aún me falta algo... - dije aún sin tocar su cuerpo con mis manos.

Cogí una de sus manos y la puse sobre mi tripa. "¿Mejor ahora?" pregunté sin dejar de besar su cuello

- Creo que ya empiezo a encontrar el camino - dije subiendo mi mano por su cuerpo. Busqué sus labios para poder saciar mis ganas de ellos

Sonreí al escucharle y respondí a sus besos de manera desenfrenada, mientras subía una de mis manos para enredarla con su pelo.

Besé sus labios con locura, con la locura que ella depertaba en mí. Subí mi mano por su cuerpo, me encantaba, cada curva, cada recoveco.

La mano de mi espalda lo apretaba contra mí, sin dejar ni un sólo milímetro entre nosotros. Podía notar los latidos de su corazón de nuevo palpitando descontrolados, eso me encantaba...

Me tumbé boca arriba, poniéndola a ella sobre mí, sin romper el beso. Metí mis manos bajo su camisa, acariciando su espalda, apretando su cuerpo contra mí.

Me separé de él apoyándome sobre mis rodillas para poder levantar su camiseta y acariciar su pecho. Noté sus manos bajos mi camisa, me volvía loca notar sus caricias recorriendo mi cuerpo...

Sentir sus manos heladas por mi cuerpo era una sensación indescriptible, quizás en otro momento, o más bien con otra persona, habría sido desagradable, pero con ella, todo era increible.

Bajé mis besos por su cuello mientras mis manos seguían recorriendo las líneas de su pecho, su cuerpo conseguía hacerme perder la razón

Me incorporé hasta quedar sentado con ella encima, busqué su cuello para besarle con ganas, no podía resistirme a besas su piel. Mientras, mis manos subían y bajaban por su espalda.

Enredé una de mis manos en su pelo mientras que con la otra apretaba su espalda para quedar totalmente pegada a él

Aparté su camiseta para poder besar su hombro, recorrí varias veces el camino desde su cuello a su hombro, subí mis besos, entreteniéndome en el hueco tras su oído.

Busqué sus labios para besarle intensamente mientras subía lentamente su camiseta acariciando su espalda

Respondí a sus besos, me separé unos centímetros de ella, mirando sus ojos - No quiero parar - dije con la respiración agitada. Deseaba su cuerpo, pero no querñia presionarla - pero lo haré si crees que es necesario. - añadí.

Escuché lo que me dijo, "No pensaba parar..." respondí volviendo a besar sus labios con ganas. Creo que aunque hubiese querido, me habría sido imposible parar...

Volví a besar sus labios con más ganas aún. Subí su camiseta, me separé el tiempo justo para poder quitársela y volví a besarla de nuevo. Acaricié su cuerpo con mayor libertad.

Le ayudé a quitarme la camiseta y aproveché que estaba sentado para quitarle la suya. No pude evitar quedarme mirando unos segundos su torso desnudo, era perfecto...