Habitaciones.

Si estoy bien gracias ay bueno me tengo que ir - le dije y me levante apoyandome de la pared y me diriji a la puerta todavia apoyandome de la pared voltie y les dije a todos adios y sali de alli

"¿Estás bien Tanya?" pregunté girándo la cabeza para mirarla. Escuché el tono inseguro de Eleazar, seguramente estaría extrañado por la presencia de Ethan, "Eleazar, este es Ethan, como habrás comprobado es humano, pero conoce lo que somos. Con él no es necesario fingir" expliqué a Eleazar con una sonrisa. Ví que Tanya se iba y la despedí, "Adios, que te mejores Tanya"

-Espero que te mejores Tanya.
me despedí de ella sin saber muy bien que le pasaba.
-Hola, yo soy Eleazar.
contesté con cierto desagrado no por hablar con un humano, sino porque no estaba acostumbrado a que supieran sobre mi condición de vampiro.

Me quedé mirando a Tanya mientras se iba, aún estaba preocupado. Escuché lo que Alice decía, así que no conocía al chico, le hice un gesto con la cabeza a modo de saludo, sentía como si no estuviera a gusto con mi presencia, quizá yo debería empezar a preocuparme, demasiado vampiro a mi alrededor. Escuché lo que me decía Seraphine - ¿Confundida por qué? - pregunté intrigado.

Noté el tono de desagrado de Eleazar y me fijé en sus ojos. Claramente no era vegetariano, aún así no parecía que tuviese ningún problema con la presencia de Ethan, ni de lejos era un neófito... más bien parecía un vampiro bastante experimentado...

Las palabras de Seraphine no se correspondían con su expresión. Yo soy un tío, no me se me daban bien estas cosas, aún así, intenté animarla - ¿Seguro que estás bien? - pregunté poniendo mi mano en la base de su espalda.

Aunque estaba acostumbrado a tratar con humanos desde hace cientos de años, nunca me gustó que se mezclaran en los asuntos de vampiros. A pesar de todo, intenté olvidar ese sentimiento y seguir conociendo a Alice.
- Cuéntame Alice, ¿tienes pensado volver a Italia de nuevo?

"Por ahora no, estoy bastante bien aquí... Es un sitio bastante tranquilo que te permite ciertas libertades que en otro lugar son mucho más complicadas de conseguir. Estoy segura de que te terminarás quedando por una larga temporada... La facilidad de salir a plena mañana es todo un lujo..." contesté a Eleazar con una sonrisa

Escuché lo que me decía, me quedé mirandola preocupado - Si necesitas hablar con alguien, yo estoy aquí - la ofrecí. Yo no sabía si podía ayudarle, pero al menos la escucharía. Miré de reojo a donde estaba Alice, después de lo de esta tarde, no quería que se molestara de nuevo.

-Algo me dice que me quedaré por un buen tiempo por aquí.
contesté sonriendo ligeramente

Solté una risita - Si son asuntos de chicas, me temo que no soy el más indicado - sonreí - Aunque si quieres ir a quemar algunas casas, avísame. Eso es bueno para relajar tensiones - dije riendo. Al menos podía intentar hacerla reir, eso se me daba mejor que los asuntos de chicas.

Sonreí y bajé la mirada al escuchar el comentario de Eleazar. Puede que no sea una indirecta Alice, me dije. Levanté de nuevo la mirada, "Me alegro, siempre es bueno conocer a gente nueva" contesté con una sonrisa amable.

- Es que el incendio lo puedo ver desde más cerca, sé que soy tan perfecto que se te olvida, pero soy humano, no puedo arriesgarme a que un montón de escombres choquen contra mí - dije divertido - Pero si quieres tú la explotas y yo quemo los restos - concluí con una sonrisa. Miré de nuevo hacia Alice, estaba hablando con ese chico, no me caía bien, no sabía por qué, aún así, no podía evitar lanzarle frías miradas.

-Lo cierto es que venía a este sitio con intención de aislarme del mundo, pero creo que me pasaré por aquí bastante.
dije sonriendo a alice

- Estos vampiros siempre tan modestos - comente irónico - Ya iremos viendo cómo lo hacemos, aunque tendremos que encontrar algún edificio abandonado, prefiero no tener antecedentes - bromeé. Escuché lo que decía, me sorprendió que dijera esas últimas palabras - ¿A ti? - pregunté confuso.

Sonreí a Eleazar, "Es fácil olvidarte de todo aquí... En concreto, creo que esta casa es el sitio más tranquilo que he conocido nunca, somos muchos, pero al ser todos vampiros, a la casa prácticamente no se le da uso..." expliqué a Eleazar. Escuché la conversación de Seraphine y Ethan, no le había hablado nunca de los dones especiales... Pero tenía curiosidad por saber el de Seraphine.

Cuando oí el nombre de Alice, la miré de reojo, quería estar seguro de que él no estaba demasiado cerca de ella. Volví a centrarme en Seraphine. - Eh... no, no me ha contado muchas cosas - O eso, o yo no lo recordaba, fuera lo que fuera, no tenía ni idea de que era eso de los poderes.

Noté cómo me miraba friamente aquel humano y como la miraba a ella. Parecía que sentía algo por ella. Todo esto unido a que comenzaba a tener sed, hizo que se me pasara por la cabeza la idea de alimentarme de él. Sin embargo, nunca me han gustado las presas fáciles. Además quizás no sería la mejor forma de empezar a conocer a Alice, alimentandome de un amigo suyo. Intenté volver a centrarme en lo que me importaba en ese momento, conocerla, a la vez que mostraba mis colmillos ampliamente con una sonrisa cada vez que el humano me miraba hostilmente.
-Alice, hay más vampiros en este pueblo?
le pregunté con el objetivo de seguir mi conversacion con ella