Isla del Faro

Me quedé mirándole al principio, estaba paralizada, ¿Estaba bromeando?. Después de unos segundos mirándole con la cara desencajada eché a reir... Creo que ahora sí que estaba loca... Estuve varios minutos sin poder dejar de reir. Esto era de locos... Cuando al fin conseguí serenarme le pregunté :"¿Acaso sospechabas algo?"

Sonreí cuando la vi reirse, no sabía si se estaba riendo de mí o conmigo, pero me daba lo mismo, se estaba riendo - No sé, ya sabes lo que se cuenta por ahí... Aunque me extraña que no vayas con capa, eso me ha decepcionado - dije divertido. Me puse serio de nuevo - Ahora en serio, cuéntame más, quiero saber cosas sobre ti - quería saberlo todo - lo bueno y lo malo.

"¿Estás seguro de que no tienes algún problema más en la cabeza a parte de lo de la memoria?" a medio camino entre lo serio y la broma. Aún me parecía surrealista..."Veamos, pues corro muy rápido, tengo mucha fuerza y podría matarte porque me alimento de sangre... ¿Alguna pregunta?" pregunté siguiéndole el juego. Empezaba a aceptar mi locura...

- La verdad, no lo sé, pero me temo que sí que debe haber algo raro - dije con una sonrisa. Escuché lo que dijo y mi sonrisa se borró, no me gustaba que dijera que podía matarme - Pero no vas a hacerlo, ¿verdad? - yo confiaba en ella, pero que me dijera que me podía matar no me hacía nada de gracia.

"¡Por fin algo de lógica en tu cabeza! ¿Hace falta que te hablen de manera tan brusca para que reacciones? No se trata de si te quiero matar, creo que sabes perfectamente que no. Se trata de que algún día se me puede ir de las manos... ¿Qué pasa si un día me enfado y al intentar cogerte del brazo te lo rompo, en el mejor de los casos...? ¿Qué pasa si cruzamos... la línea? Podría intentar apoyarme en tí y destrozarte por dentro... No es mi intención asustarte, pero es que creo que no tomas conciencia de lo que pasa...Quiero que si tomas una decisión la tomes sabiendo todos los riesgos que corres... Quiero ser sincera contigo...". Esperaba que al menos este discurso lo tomara en serio. No quería que se fuera, pero no podía estar con él sin estar segura de que sabía a que se enfrentaba...

Escuché lo que me decía - Pero en todo este tiempo no me has hecho daño - dije mirándola - Pero es que yo ya no puedo elegir... te... - esto era muy difícil de reconocer, no solía llegar tan lejos como para tener sentirlo de verdad - te quiero demasiado como para dejarte ir - bajé la mirada algo avergonzado. El resto de mis pensamientos viajaban hacia otra parte - ¿No vamos a poder... pasar la línea nunca? - pregunté

"No es tan fácil Ethan. Al principio me costaba mucho controlarme, poco a poco me acostumbro a tí, a tu piel caliente, a tu aroma, al latir de tu corazón... Pero hay momentos en los que es difícil pensar con claridad, momentos en los que predominan los instintos... ¿Entiendes lo que te digo?". Escuché sus palabras y me tensé. ¿Había dicho te quiero? ¿Lo había oído bien?. Ayer estábamos discutiendo porque no quiso cenar conmigo y ahora..."No lo sé, yo también... te quiero demasiado como para correr ese riesgo..."

Escuché lo que decía - Entonces, ¿cada vez es más fácil? - pregunté intentando entenderlo - ¿O siempre va a ser así? Siempre controlandote y corriendo el riesgo - hice una mueca, no me gustaba eso, no quería tener que estar siempre llendo con cuidado, de hecho no creía que fuera capaz de conseguirlo, me volvía loco cuando ella estaba cerca. Oí sus últimas palabras y de nuevo mi corazón se aceleró, esta vez me avergoncé, lo que hizo que fuera más rápido, ahora que sabía que ella sentía mi corazón a la perfección, me era imposible ocultar mis emociones.

Escuché como su corazón se aceleró cuando le dije que le quería, no pude evitar sonreir... "No sé si puedo llegar a tener tanto control sobre mis instintos... no es fácil. Por ahora, cada vez me ha costado menos, pero ahora no hablamos de besarte...". Me hubiese gustado contestarle otra cosa, pero no estaba tan segura, y prefería decirle la verdad...

Medité unos instantes sobre lo que me había dicho - ¿Y ahora qué? - repetí la pregunta que ella me había hecho un rato antes.

"Estamos en un punto muerto..." contesté con la mirada fija en el suelo.

- No me gusta esa respuesta - dije sincero. Me tumbé en la arena mirando al cielo, no sabía si estaba mejor sin saberlo y viviendo con la duda o sabiéndolo y no saber qué hacer al respecto.

"Lo siento, debería haber cargado con esto yo sola...". Se arrepiente... debí haberlo visto venir...

Cerré los ojos, no me sentía bien, suspiré - No digas eso - pasé una mano por su cintura y la coloqué sobre mí - Quiero estar contigo, y quiero saberlo todo sobre ti - dije mirando sus ojos - Es sólo que esto es demasiado, y necesito asimilarlo - De repente otro pensamiento vino a mí ¿y si mañana no me acordaba? ¿Y si me levantaba y leía eso? Me imaginaba la situación, qué iba a pensar si leía que ella era un vampiro...

"Tómate el tiempo que necesites"contesté mientras apoyaba la cabeza en su pecho. Hubiese dado cualquier cosa por verle como esta mañana en mi cama...

Acaricié su pelo distraído - Esto es muy difícil - reconocí. Me quedé mirando al cielo, no sabía qué decirla, no quería que siguiera mal, pero tampoco quería mentirle. - No quiero que estés así, no quiero verte mal - dije apenado.

"Demasiado..." contesté mientras acariciaba su cintura. "Tampoco a mí me gusta verte mal..."

- Podemos seguir como hasta ahora, y cuando estés preparada para más solo tienes que decirlo - Era la mejor opción que podía ocurrírseme. Alcé la cabeza y la di un beso suave - Puedo conformarme con esto - dije antes de sonreir.

"Me parece bien, tampoco tenemos muchas opciones para elegir...". Ví que me besaba y escuché lo que me dijo. "Sabes perfectamente que tengo más control que eso..."

Sonreí, al menos las cosas se habían calmado un poco. Escuché su última frase - ¿Seguro? No quiero que tengas que esforzarte demasiado - dije divertido.- De hecho, creo que lo mejor es que no tengamos contacto físico, al menos por ahora - dije haciendo el amago de separarla de mí.

"Estás de broma, ¿no? No hice todos los esfuerzos que he hecho para conseguir lo que tenmos para que me vengas con esas..." dije mientras hacía caso omiso de sus intentos y me pegaba más a él. "Además, tengo que trabajar en mi nueva meta... y para eso tengo que llegar a mi máximo muchas muchas veces..." dije divertida mientras dejaba mis labios rozando con los suyos...

Escuché lo que me decía - Yo lo hacía por ti, pero si te vas a poner así... - acorté la distancia que había entre nuestros labios besándola, aunque lo hice despacio. Metí mis manos bajo su camiseta, acariciando su espalda. Me alegraba no tener que contenerme, seguir disfrutando de su cuerpo sin tener que preocuparme.

Bajé mis besos por su cuello mientras metía una mano bajo su camiseta, acariciando su costado. Me pareció imposible haber estado sin esto desde hacía ya tantas horas... ahora me sería imposible parar.

Sentí sus besos por mi cuello, de nuevo sentí mi corazón desbocado, había echado de menos sus besos y sus caricias, llevábamos una tarde demasiado seria y ahora podía olvidarlo todo. Bueno, no todo, ahora al menos sabía el motivo por el que debía parar.

Sonreí cuando noté que su corazón se aceleraba. Subí mi mano hasta su pecho, quería notarlo de nuevo latiendo bajo mi mano. Pasé mis besos por su mandíbula para llegar a sus labios. Los deseaba...